Taylor Swift perdió 5 millones de seguidores en Instagram durante la noche después del atractivo público de Elon Musk para bloquearlo y boicotearla. La decisión del CEO de Tesla y Twitter provocó una ola de controversia, empujando a muchos fanáticos y seguidores a expresar su decepción.
El accidente también tuvo repercusiones en la familia Kardashian, que vio que su popularidad cayera drásticamente. Se han perdido más de 3 millones de seguidores a favor de los miembros de la familia, desatando un debate en las redes sociales sobre la creciente influencia de Musk en el entretenimiento y la cultura pop.
El contexto de esta situación se refiere principalmente a las opiniones políticas y personales de Swift y la creciente tensión entre ella y algunos de sus colegas en el sector de la música y las redes sociales. Musk, conocido por su fuerte presencia en línea, ha publicado estas declaraciones en respuesta a las críticas públicas de que consideraba problemas.
La pérdida del seguidor de estas figuras públicas destaca cómo la dinámica de las redes sociales puede verse fuertemente influenciada por los conflictos entre las celebridades y otras figuras poderosas, generando divisiones entre los fanáticos y afectando la gestión de las plataformas sociales en relación con la libertad de expresión.