El mundo del entretenimiento no es ajeno a los acalorados debates sobre las elecciones de casting, pero el reciente enfrentamiento entre la actriz Francesca Amewudah-Rivers y la autora J.K. Rowling ha desatado una conversación que trasciende la pantalla. Amewudah-Rivers, una estrella británica en ascenso, envió un poderoso mensaje a Rowling después de que la autora supuestamente criticara su elección como Rapunzel en la próxima adaptación de acción real de HBO de Enredados. La audaz declaración de la actriz, “Respeta mi color de piel”, ha encendido discusiones sobre raza, representación y la dinámica de poder de las decisiones de casting de Hollywood. En respuesta, Rowling dio una réplica sucinta pero directa de siete palabras: “El casting debe reflejar la esencia de la historia”. Este intercambio no solo ha generado revuelo en línea, sino que también ha planteado preguntas sobre la libertad artística, la diversidad en los medios y las responsabilidades de figuras influyentes como Rowling.
Francesca Amewudah-Rivers no es una recién llegada a la fama, aunque su nombre ha cobrado mucha relevancia en los últimos años. Nacida en Brighton, de padre ghanés y madre nigeriana, debutó en el West End en 2024 como Julieta junto a Tom Holland en la producción de Romeo y Julieta de Jamie Lloyd. Su actuación le valió el prestigioso Premio Ian Charleson y el Premio del Círculo de Críticos de Teatro a la Mejor Actriz Revelación en 2025. Sin embargo, su elección como Julieta no estuvo exenta de controversia. Amewudah-Rivers se enfrentó a una avalancha de insultos raciales en línea, lo que llevó a más de 800 actores negros, incluyendo figuras como Lashana Lynch y Sheila Atim, a firmar una carta abierta en su apoyo. La carta, publicada en The Guardian, condenaba los “insultos racistas y misóginos” dirigidos contra ella, describiéndolos como “demasiado insoportables” para una joven promesa. Esta experiencia, al parecer, ha moldeado la determinación de Amewudah-Rivers de enfrentar las críticas directamente, como se ve en su reciente declaración a Rowling.
La controversia en torno a la elección de Amewudah-Rivers como Rapunzel en Enredados de HBO surge de un patrón familiar. Las plataformas de redes sociales, en particular X, se han visto inundadas de comentarios que cuestionan la decisión de elegir a una actriz negra para un papel tradicionalmente representado como una princesa de piel clara y cabello dorado en la película animada de Disney de 2010. Los críticos argumentan que el casting se desvía de la imagen “histórica” o “tradicional” de Rapunzel, un personaje con raíces en el folclore europeo. Sin embargo, estos argumentos a menudo pasan por alto el hecho de que Enredados es una historia de ficción, no un documento histórico, y que sus temas de libertad, autodescubrimiento y resiliencia son universales. Amewudah-Rivers abordó esto directamente en su declaración: “Respeten el color de mi piel. Soy Rapunzel porque encarno su espíritu, su fuerza y su historia. Mi negritud no borra eso, lo realza”. Sus palabras resuenan con un movimiento creciente en el entretenimiento que desafía las normas rígidas de casting y celebra diversas interpretaciones de personajes queridos.
La respuesta de J. K. Rowling, “El casting debe reflejar la esencia de la historia”, ha echado más leña al fuego. Conocida por sus opiniones francas, Rowling ha enfrentado críticas en los últimos años por sus comentarios sobre diversos temas sociales, incluyendo la identidad de género y la raza. Su declaración de siete palabras, compartida a través de una publicación en X, sugiere la creencia de que las decisiones del casting deben alinearse estrechamente con la visión original de una historia. Sin embargo, esta perspectiva ha sido objeto de escrutinio, en particular dado el historial de comentarios polémicos de Rowling. Por ejemplo, en 2016, defendió la elección de Noma Dumezweni como Hermione Granger en Harry Potter y el legado maldito, afirmando que Dumezweni era “la mejor para el trabajo”. Sin embargo, sus comentarios recientes sobre el casting de Amewudah-Rivers parecen contrastar con esa postura anterior, lo que lleva a algunos a cuestionar si sus puntos de vista han cambiado o se aplican de forma selectiva.
El debate sobre la elección de Amewudah-Rivers para el papel refleja controversias similares de los últimos años. Cuando Halle Bailey fue elegida para interpretar a Ariel en la película de acción real de Disney, La Sirenita, se enfrentó a una ola similar de críticas en línea, con críticos que calificaron la elección de “falsa autenticidad”. Asimismo, el papel de Zendaya como MJ en Spider-Man y la elección de Ambika Mod para One Day de Netflix provocaron reacciones racistas, lo que puso de manifiesto la persistente resistencia a ver a actores de color en papeles tradicionalmente blancos. Un análisis de redes sociales realizado por Glitch en 2023 reveló que la misoginia negra (prejuicios contra las mujeres negras, específicamente) es cada vez más común en línea, y a menudo se dirige a actrices como Amewudah-Rivers que asumen papeles de alto perfil. La carta abierta en apoyo de su elección para Romeo y Julieta señalaba: “El abuso racista y misógino dirigido a un alma tan dulce ha sido insoportable”, un sentimiento que resulta muy relevante en la controversia de Enredados.
La decisión de HBO de elegir a Amewudah-Rivers para el papel de Rapunzel demuestra su compromiso con la diversificación de los cuentos clásicos, una decisión que se alinea con las tendencias generales de la industria. El Informe de Diversidad de Hollywood de 2024 de la UCLA reveló que, si bien las personas de color representaron el 22 % de los papeles en pantalla en las películas, la representación tras bambalinas sigue siendo limitada, con solo el 17 % de los directores y el 12 % de los guionistas siendo personas de color. Decisiones de casting como la de Amewudah-Rivers son un paso para abordar este desequilibrio, pero también exponen los prejuicios profundamente arraigados que persisten en las reacciones del público. La Jamie Lloyd Company, productora de Romeo y Julieta, emitió un comunicado durante esa controversia: «El acoso y la intimidación no tienen cabida en línea, en nuestra industria ni en nuestras comunidades en general». HBO aún no ha emitido un comunicado oficial sobre la reacción negativa de Enredados, pero el precedente establecido por los partidarios de Amewudah-Rivers sugiere que la industria está cada vez más dispuesta a apoyar la diversidad de su talento.
Lo que hace que este momento sea particularmente cautivador es la negativa de Amewudah-Rivers a ser silenciada. Su trayectoria como artista multifacética —es pianista de música clásica y jazz, toca varios instrumentos y compuso música para cortometrajes como Medea y Minutes— aporta profundidad a su interpretación de personajes complejos. En la Universidad de Oxford, donde estudió música, fundó una sociedad para estudiantes de color, produciendo una adaptación de Medea que fusionaba poesía y música. Esta audacia creativa se evidencia en su aproximación a Rapunzel, un papel que ella describe como «una oportunidad para reimaginar una historia que llegue a todos, sin importar su apariencia». Su declaración desafía la idea de que solo ciertas apariencias pueden encarnar ciertas historias, invitando al público a repensar el significado de la representación en 2025.
La concisa respuesta de Rowling, aunque provocadora, deja espacio a la interpretación. ¿Se refiere la “esencia de la historia” a una estética visual específica o podría abarcar el núcleo emocional y temático de Enredados? Los fans de la película animada original saben que el viaje de Rapunzel trata sobre liberarse del encierro, encontrar coraje y abrazar su identidad, cualidades que trascienden la raza. Quienes apoyan a Amewudah-Rivers argumentan que su elección realza estos temas, aportando una perspectiva fresca a un personaje cuya historia resuena en todas las culturas. La propia actriz lo ha enfatizado al afirmar: “Soy Rapunzel porque encarno su espíritu”. Sus palabras son un llamado a la acción, instando al público a mirar más allá de las diferencias superficiales y a abrazar la universalidad de la narrativa.
A medida que el proyecto Enredados avanza, con el inicio previsto del rodaje en 2026, es improbable que la conversación sobre la elección de Amewudah-Rivers se desvanezca. Las plataformas de redes sociales como Facebook, donde públicos diversos interactúan con las noticias de entretenimiento, desempeñarán un papel importante en la percepción pública. La historia ya ha cobrado fuerza en X, con hashtags como #RespectFrancesca y #TangledCasting siendo tendencia entre sus seguidores. Para el algoritmo de Facebook, que prioriza el contenido atractivo y compartible, esta controversia está hecha a medida: es emotiva, polarizadora y profundamente personal. Sin embargo, también es una oportunidad para un diálogo significativo. La postura de Amewudah-Rivers contra Rowling no es solo una defensa de su elección, sino una declaración más amplia sobre el derecho a existir auténticamente en espacios que históricamente han excluido a las personas de color.
El enfrentamiento entre Amewudah-Rivers y Rowling es más que una disputa de casting: es un microcosmos de la lucha constante de la industria del entretenimiento por la diversidad y la inclusión. Mientras el público espera la llegada de Enredados de HBO, la pregunta persiste: ¿este momento impulsará a la industria a adoptar una narrativa diversa o profundizará la división? Amewudah-Rivers, con su postura sin complejos, ha dejado algo claro: está aquí para contar historias, y ninguna reacción negativa la apagará. Sus últimas palabras al respecto perduran: “Respeten el color de mi piel”. Es un desafío, una súplica y una declaración a la vez, una que exige ser escuchada.