Pecco Bagnaia, actual campeón del mundo de MotoGP, ha levantado una gran polémica tras declarar públicamente su frustración con el director general de Ducati Corse, Gigi Dall’Igna. En declaraciones recientes, Bagnaia expresó su enojo al afirmar que el liderazgo técnico de Dall’Igna “lo ha empeorado” en lugar de ayudarlo a mejorar su rendimiento en pista. Estas palabras, sorprendentes por su tono directo, han generado revuelo tanto dentro del paddock como entre los aficionados del motociclismo.
Bagnaia no se contuvo al describir cómo ciertas decisiones técnicas y estratégicas tomadas por el equipo han afectado negativamente su confianza y sus resultados. Según fuentes cercanas, el piloto italiano considera que algunas de las modificaciones implementadas en su moto durante esta temporada no han estado alineadas con su estilo de pilotaje, generándole incomodidad y una sensación de descontrol durante las carreras. Esto ha llevado a una pérdida de ritmo y consistencia que, según él, podrían haberse evitado si se hubiera escuchado más su opinión.
Al mismo tiempo, el foco mediático se ha desplazado hacia las ofertas privadas sin precedentes que ha recibido Marc Márquez. El múltiple campeón del mundo se encuentra en una posición privilegiada en el mercado de pilotos, y diversas marcas —incluidas algunas rivales directas de Ducati— estarían dispuestas a hacer movimientos significativos para ficharlo. Estas ofertas incluyen contratos millonarios, beneficios técnicos exclusivos, e incluso influencia directa en el desarrollo de las motos.
Este contexto ha creado tensiones internas en Ducati, ya que la posible llegada de Márquez al equipo oficial podría poner en riesgo la posición de Bagnaia como piloto número uno. Si bien oficialmente no se ha confirmado ningún acuerdo, se rumorea que Gigi Dall’Igna estaría dispuesto a todo por incorporar a Márquez, considerando que su talento y experiencia podrían traer títulos adicionales a la fábrica de Borgo Panigale.
Los comentarios de Bagnaia, aunque inesperados, reflejan la presión creciente dentro de Ducati por mantener el liderazgo en MotoGP. En un campeonato tan competitivo, las decisiones estratégicas y técnicas deben estar milimétricamente calculadas, y cualquier desalineación entre piloto y equipo puede desencadenar conflictos difíciles de manejar.
Mientras tanto, los aficionados esperan una aclaración oficial por parte de Dall’Igna y Ducati, y muchos se preguntan si esta ruptura interna podría afectar el rendimiento del equipo durante el resto de la temporada. Por otro lado, la posible llegada de Márquez promete cambiar completamente el equilibrio de poder en la categoría reina.
Con el futuro de Bagnaia en Ducati ahora en duda y las negociaciones con Márquez en marcha, el mundo de MotoGP se encuentra ante una de las etapas más intrigantes de los últimos años.