Hamilton y los pilotos de F1 critican el estilo de conducción “inaceptable” de Verstappen mientras aumentan las peticiones de sanciones más severas tras el caos del GP de España.
El paddock de la Fórmula 1 se está recuperando de las consecuencias del Gran Premio de España de 2025, celebrado el 1 de junio en el Circuit de Barcelona-Catalunya, donde el estilo de conducción agresivo de Max Verstappen ha generado fuertes críticas de sus compañeros, incluido Lewis Hamilton, y ha generado peticiones generalizadas de una multa más severa. A las 15:43 h +07 del martes 3 de junio de 2025, la polémica en torno a la colisión de Verstappen con George Russell al final de la carrera sigue acaparando titulares. Las acciones del piloto de Red Bull han sido calificadas de “inaceptables” tanto por sus compañeros como por la afición, lo que aumenta la presión sobre la FIA para que imponga sanciones más severas.
El incidente ocurrió durante un tenso reinicio tras la salida del coche de seguridad en la vuelta 55, provocado por el abandono de Kimi Antonelli. Verstappen, que rodaba con neumáticos duros debido a la estrategia de Red Bull, chocó con Charles Leclerc en la recta principal antes de una colisión más controvertida con Russell en la curva 5. Tras recibir instrucciones de ceder la posición para obtener una ventaja fuera de pista en la curva 1, Verstappen aceleró mientras Russell lo adelantaba, provocando un contacto que la FIA consideró deliberado. Los comisarios le impusieron una penalización de 10 segundos, lo que relegó a Verstappen del quinto al décimo puesto, y añadieron tres puntos de penalización a su superlicencia, lo que elevó su total de 12 meses a 11, uno menos que la suspensión automática de la carrera. Sin embargo, muchos en la comunidad de la F1 argumentan que la sanción no se corresponde con la gravedad del incidente.
Lewis Hamilton, ahora con Ferrari, fue uno de los primeros en expresar su frustración, declarando en una entrevista posterior a la carrera: “El estilo de conducción de Max hoy fue inaceptable. Ya hemos visto este patrón antes y es peligroso. La FIA debe tomar medidas más contundentes para sentar un precedente”. Hamilton, quien tuvo dificultades para llegar a la sexta posición tras ser superado por Nico Hulkenberg al final de la carrera, tiene un historial de batallas en pista con Verstappen, en particular su lucha por el título de 2021, y sus comentarios reflejan una preocupación más amplia entre los pilotos sobre la agresividad de Verstappen. George Russell, víctima directa del incidente, declaró a Sky Sports: “Parecía deliberado. He visto esas maniobras en carreras de simulación, pero nunca en F1. Es una pena para los jóvenes que aspiran a ser pilotos”. Los sentimientos de Russell fueron repetidos por Charles Leclerc, quien también contactó con Verstappen, diciendo: “Necesitamos consistencia en cómo se gestionan estos incidentes”.
Las críticas no se limitaron a los pilotos. El excampeón mundial Nico Rosberg, comentarista de Sky Sports, pidió una bandera negra, argumentando: “La penalización de 10 segundos fue leve. Esto fue deliberado y peligroso”. Los aficionados en redes sociales se han expresado abiertamente, y muchos han calificado las acciones de Verstappen de “petulantes” y han exigido una suspensión de la carrera para frenar lo que consideran un patrón de comportamiento imprudente. Algunos señalaron incidentes pasados, como su choque con Lando Norris en el GP de Austria de 2024, como evidencia de un problema recurrente. Otros, sin embargo, defienden a Verstappen, argumentando que su estilo agresivo es lo que lo convierte en cuatro veces campeón, aunque incluso el asesor de Red Bull, Helmut Marko, admitió que la penalización fue “merecida”.
Verstappen, ahora a 49 puntos del líder del campeonato, Oscar Piastri, tras la victoria del piloto de McLaren en España, emitió una disculpa velada, diciendo: “No debería haber sucedido”, pero se negó a hablar con Russell, declarando a De Telegraaf: “No tengo nada que decirle”. Esta respuesta solo ha avivado el fuego, con pilotos como Hamilton y Leclerc pidiendo a la FIA que revise su sistema de sanciones. El jefe de la FIA defendió la decisión, declarando: “La sanción refleja nuestro compromiso con la seguridad”, pero la falta de orientación en tiempo real durante la carrera, especialmente cuando Red Bull buscó claridad, ha generado escrutinio. Algunos sugieren que la inacción inicial de la FIA en el incidente de la curva 1, que irónicamente significó que Verstappen no necesitaba ceder el paso, puede haber aumentado las tensiones.
Mientras Verstappen se tambalea al borde de la suspensión de una carrera, las peticiones de una multa más cuantiosa o sanciones adicionales subrayan la creciente división en la F1. Con las próximas carreras en Canadá y Austria a la vuelta de la esquina, Verstappen tiene mucha presión para mantener la calma y para que la FIA aborde el creciente descontento con su estilo de pilotaje. Los aficionados y los pilotos del deporte esperan una resolución, pero una cosa está clara: la “niebla roja” de Verstappen ha ensombrecido sus aspiraciones al título de 2025.