“No es todo lo que parece”, Max Verstappen revela con entusiasmo su casa de Mónaco de £13,4 millones con su hija
El actual campeón mundial de Fórmula 1, Max Verstappen, recientemente le dio al mundo un vistazo de su lujosa vida en Mónaco, donde reside en un impresionante ático valuado en £ 13,4 millones. Aunque su nombre es sinónimo de velocidad, éxito y riqueza, el piloto holandés ha demostrado que su vida no es todo brillo y glamour. Con la reciente llegada de su hija Lily, fruto de su relación con Kelly Piquet, Verstappen ha revelado una nueva faceta de sí mismo: la de un padre devoto que disfruta de los pequeños momentos en casa, lejos del rugido de los motores y las cámaras deslumbrantes de la Fórmula 1. Su casa en Mónaco, aunque impresionante, es un refugio, un símbolo de riqueza, un refugio para su familia.
Verstappen se mudó a Mónaco en 2015, poco después de cumplir 18 años, y eligió vivir en el exclusivo barrio de Fontvieille, famoso por sus impresionantes vistas del Mediterráneo y su proximidad al puerto de Mónaco. Su ático, que alquila en lugar de comprar, combina sencillez y lujo. Desde el exterior, el edificio puede parecer modesto, pero en su interior revela un espacio amplio y elegante, con paredes blancas, suelos de parquet y una cuidada decoración. Su balcón, donde Verstappen entrena a menudo con vistas al mar azul celeste, es un gran atractivo. Es su “lugar feliz”, donde utiliza equipos de gimnasio como pesas rusas y un marco de estiramiento mientras disfruta de los 300 días de sol de Mónaco. Este balcón no sólo es un lugar de entrenamiento físico, sino también un oasis de tranquilidad donde desconectar del bullicio del mundo del motor.
Dentro del Penthouse, el diseño es moderno y elegante. Las fotos que compartió en las redes sociales muestran una elegante sala de estar con una alfombra de piel de vaca, una elegante mesa de café negra y obras de arte únicas con temática de animales. Las plantas de gran tamaño aportan un toque de verde al espacio, creando un ambiente fresco y acogedor. Su dormitorio, que mostró mientras preparaba las maletas para un viaje, tiene una cama tamaño queen con cabecera capitoné con detalles geométricos y ropa de cama negra a juego. Un espejo largo apoyado en la pared del pasillo le da a la habitación un aspecto contemporáneo. Estos detalles, aunque sutiles, demuestran que Verstappen valora un entorno de vida cómodo y agradable, a pesar de su ritmo de vida agitado.
Pero lo que hace que esta casa sea tan especial es el papel que desempeña en la nueva vida de Verstappen como padre. La llegada de su hija Lily a principios de mayo de 2025 cambió sus prioridades. Aunque sigue siendo uno de los pilotos más centrados y competitivos de la parrilla, como él mismo destacó tras conseguir la pole position en el Gran Premio de Miami poco después de su nacimiento, la paternidad le ha traído una nueva fuente de alegría. En una entrevista con ESPN, Verstappen enfatizó que la paternidad no lo ha frenado: “Definitivamente no me ha frenado, así que podemos dejarlo ir”, dijo con una sonrisa. En su casa de Mónaco, pasa tiempo con Penélope, la hija de Lily y Kelly, a quien considera un “padre extra”. Los momentos en los que se mantiene en contacto con su familia a través de FaceTime o juega con los niños durante las sesiones de simulación de carreras revelan un lado más tierno del campeón.
La decisión de Verstappen de alquilar su ático en lugar de comprarlo ha alimentado las especulaciones sobre sus planes futuros. Algunos sugieren que tal vez no considere a Mónaco su residencia principal, a pesar de los beneficios fiscales y la proximidad a otros pilotos de F1 como Lewis Hamilton y Lando Norris. Su decisión de alquilar puede indicar un deseo de flexibilidad, tal vez mirando hacia un futuro en otro lugar con su familia en crecimiento. Pero por ahora, parece contento con su vida en Mónaco, donde disfruta de la paz y el lujo que ofrece el principado.
Además de su casa, Verstappen posee una impresionante colección de vehículos, incluido un jet privado (un Dassault Falcon 8x) y una colección de coches de lujo, como un Aston Martin Valkyrie y un Porsche 911 GT3 RS. Estos atributos reflejan su pasión por la velocidad, dentro y fuera de la pista. Pero es su papel de padre el que en estos momentos atrae más atención. En el Gran Premio de Mónaco de 2025, donde comenzó cuarto, dijo que Lily durmió bien, lo que lo ayudó a mantenerse fresco para la carrera. Historias personales como estas hacen que Verstappen sea más humano y cercano, a pesar de su condición de uno de los pilotos más ricos y exitosos del automovilismo.
La vida de Max Verstappen en Mónaco es mucho más que una fachada de lujo. Es un lugar donde equilibra sus obligaciones profesionales y personales, donde no sólo es un campeón sino también un padre amoroso y compañero. Aunque el mundo sigue considerándolo un conductor imbatible, su casa en Mónaco ofrece una visión del hombre detrás del volante: alguien que, a pesar de su prestigio de 13,4 millones de libras, valora las simples alegrías de la vida familiar por encima de todo.