El mundo del fútbol y la publicidad se revoluciona: James Quincey, presidente y director ejecutivo de Coca-Cola, hizo una oferta sin precedentes de 50 millones de dólares a la estrella del fútbol Cristiano Ronaldo para anunciar su próxima boda con Georgina Rodríguez para la mundialmente famosa marca de bebidas. La noticia, que inicialmente parecía una audaz maniobra publicitaria, dio un giro inesperado cuando Ronaldo reaccionó con un breve comentario de cinco palabras que enfureció a Quincey. La posterior declaración del portugués, que conmocionó al mundo empresarial y a la comunidad futbolística, fue aún más impactante.
Cristiano Ronaldo, uno de los deportistas más famosos del mundo, no solo es famoso por sus logros en la cancha, sino también por su enorme alcance en redes sociales, con casi 300 millones de seguidores en Instagram. El poder de su marca es innegable y ha estado compitiendo por conseguir apoyo durante años. Sin embargo, Coca-Cola ha tenido una relación controvertida con Ronaldo en el pasado. En 2021, el futbolista acaparó titulares durante una rueda de prensa de la Eurocopa cuando, de forma ostentosa, levantó dos botellas de Coca-Cola y, en su lugar, una botella de agua con la palabra “¡Agua!”. Este momento viral provocó, según se informa, una caída de 4.000 millones de dólares en el valor bursátil de Coca-Cola, aunque análisis posteriores demostraron que la caída se debió más a otros factores, como el Dividend Ex-Day. No obstante, este incidente sigue siendo un rayo de esperanza para la compañía.
James Quincey, CEO de Coca-Cola desde 2017, es conocido por sus audaces estrategias para posicionar la marca como un gigante global en la industria de las bebidas. Su idea de utilizar la boda de Ronaldo con Georgina Rodríguez, prevista para 2026, como plataforma publicitaria fue celebrada internamente como una decisión brillante. Se espera que la boda de la pareja, que lleva junta desde 2016 y tiene varios hijos, sea uno de los eventos de celebridades más respetados de los próximos años. Quincey vio esto como una oportunidad para combinar Coca-Cola con glamour y atención global. La oferta de 50 millones de dólares incluyó no solo la colocación de productos de Coca-Cola, sino también la creación de una campaña única “Coca-Cola X Ronaldo”, que se espera que transforme el evento en un fenómeno de marketing global.
Pero la reacción de Ronaldo frustró las esperanzas de la compañía. Según fuentes internas, el futbolista respondió con las palabras: “Solo bebo agua, lo siento”. Esta breve y directa declaración, que recordaba a su infame momento “Agua”, fue como una bofetada para Quincey. Ronaldo, conocido por su rigurosa filosofía de salud y bienestar, se había pronunciado repetidamente contra las bebidas azucaradas, lo que había puesto a Coca-Cola en una situación precaria. Pero eso no es todo: Ronaldo presentó una contrademanda que superó incluso las expectativas más descabelladas. Exigió que Coca-Cola lanzara una nueva línea de bebidas saludables sin azúcar bajo su marca, con una participación del 75% en los beneficios para él y un presupuesto global de marketing de otros 100 millones de dólares. Esta exigencia, descrita como “excesiva”, paralizó las negociaciones.
Las reacciones en el mundo empresarial y entre la afición son diversas. Algunos elogian la firmeza de Ronaldo al representar constantemente sus creencias sobre la salud y la nutrición, mientras que otros ven la oferta de otros quinceañeros como un intento desesperado por compensar el daño a su imagen que ha sufrido durante tanto tiempo. La tensión entre ambas partes ha atraído la atención de los medios de comunicación internacionales, y cada movimiento es seguido de cerca. Para Coca-Cola, hay mucho en juego: la compañía, que se espera que reporte ventas superiores a los 45 000 millones de dólares en 2024, no puede permitirse el lujo de caer en un desastre de relaciones públicas. Quincey, reconocido en el pasado por su capacidad para revitalizar la marca mediante innovaciones como Coca-Cola Zero Azúcar, ahora se enfrenta a un reto que afecta tanto a su reputación como a la dirección estratégica de la compañía.
Mientras continúan las negociaciones, aún no está claro si se podrá llegar a un acuerdo. La demanda de Ronaldo de una línea de bebidas saludables podría ser una oportunidad para que Coca-Cola se posicione en un segmento de mercado en crecimiento, pero los obstáculos financieros y logísticos son enormes. El mundo del fútbol y el mundo empresarial esperan con ansias nuevos avances. Una cosa es segura: esta historia será noticia durante mucho tiempo.