El FC Barcelona ha puesto sus ojos en el lateral derecho del Inter de Milán, Denzel Dumfries, según ha informado el reconocido periodista Fabrizio Romano. El internacional neerlandés de 29 años cuenta con una cláusula de rescisión de 25 millones de euros en su contrato, válida hasta mediados de julio, lo que lo convierte en una opción atractiva para reforzar la defensa blaugrana. Sin embargo, el club catalán aún no ha presentado una oferta formal ni ha iniciado negociaciones oficiales con el Inter, ya que su prioridad actual es cerrar el fichaje de Nico Williams.

Dumfries, quien destacó la pasada temporada con 11 goles y 6 asistencias en 47 partidos, es considerado un lateral moderno, potente y con gran capacidad ofensiva, ideal para el sistema de Hansi Flick. Su actuación estelar contra el Barcelona en las semifinales de la Champions League 2024/25, donde marcó dos goles y dio tres asistencias, dejó una impresión duradera en el club. A pesar de su contrato con el Inter hasta 2028, la cláusula de rescisión ofrece una ventana de oportunidad para equipos como el Barcelona o el Manchester United, que también ha mostrado interés.

No obstante, la situación financiera del Barcelona complica el panorama. El club trabaja para cumplir con las reglas del Fair Play Financiero de LaLiga y prioriza la incorporación de Williams, cuya cláusula asciende a 58 millones de euros. Además, posibles salidas como la de Raphinha, valorada en hasta 150 millones de euros según rumores, podrían liberar fondos para movimientos como el de Dumfries. Sin embargo, la urgencia de actuar antes del 15 de julio, cuando expira la cláusula, plantea un desafío logístico.

El interés en Dumfries responde a la necesidad de un lateral derecho que compita con Jules Koundé, quien ha sido titular habitual pero sufrió una lesión por sobrecarga la temporada pasada. Aunque Eric García y Gerard Martín han cubierto la posición, Flick busca un especialista con experiencia de alto nivel, y Dumfries encaja perfectamente por su versatilidad y físico. No obstante, el Barcelona debe equilibrar sus finanzas y decidir si aprovechar esta oportunidad de mercado antes de que expire la cláusula.