La comunidad científica y las mentes curiosas están cautivadas por una peculiar criatura momificada descubierta en la Universidad de Michigan, generando intriga y especulaciones desde su inquietud en 2018. Doblado “Capacabra” por los estudiantes de la universidad de la arqueología del campus programas, las criaturas exhiben que resonan tanto los animales comunes como con el echo de la legendaria storial de Chupacabra de Chupacabra.

El atributo más llamativo de este hallazgo enigmático es sus manos casi humanas. Con cinco dedos, uñas completas y una apariencia con garras, sus manos presentan una extraña semejanza con las de un humanoide. Jerielle Cartales, una estudiante de doctorado especializada en antropología forense e investigadora principal en el caso, comentó: “La criatura está muy momificada”, al tiempo que señala que su edad precisa sigue siendo un misterio. Si bien no puede ser mayor de 1889 debido a la fecha de construcción del edificio donde se encontró, la duración que pasó oculta en la estructura de la universidad podría variar de meras semanas a varias décadas.

Las imágenes y las descripciones del espécimen ilustran sus características cautivadoras. Aproximadamente del tamaño de un gato pequeño, la criatura posee una cola notablemente larga y delgada y restos secos y polvorientos de la nariz y las orejas. Las identificaciones iniciales incluían varios animales, como las zarigüeyas y las ratas; Sin embargo, las hipótesis principales se han superado hacia la posibilidad de que sea un mapache. “Como científico, nunca puedo decir que estoy 100% seguro, pero por ahora, creo que hay aproximadamente un 75% de posibilidades de que este sea un mapache”, dijo Cartales, haciéndose eco de la incertidumbre y la emoción que rodea a la criatura.
Para investigar más a fondo, la momia se sometió a un examen de rayos X, revelando un marco esquelético que retiene algunos dientes. Sin embargo, sin un análisis dental comparativo, una identificación definitiva se mantuvo difícil de alcanzar, ya que los mapaches disponibles para el estudio carecían de dientes, agregando una capa adicional de complejidad para la clasificación de la criatura.

Agregando intriga a su historia de fondo, los cartales especula que la criatura puede haberse quedado atrapada dentro de los conductos de aire del edificio, donde las condiciones eran óptimas para la momificación: la secidez y el calor crean un entorno de preservación. “La momificación ocurre en ambientes muy secos y calientes. Este tipo de sistema de conductos podría haber proporcionado las condiciones perfectas para este proceso”, explicó.

Desde su descubrimiento, Capacabra ha evolucionado más allá de su importancia científica inicial, convirtiéndose en una mascota para el programa de arqueología del campus. El nombre refleja no solo las iniciales del programa, sino también el rico folklore que inspira mentes curiosas en toda la universidad. La yuxtaposición de la ciencia con narrativas míticas enriquece la tradición de la criatura, alentando el diálogo e investigación en curso.

A pesar de que los investigadores continúan analizando sus características, el encanto de Capacabra cautiva a una audiencia diversa. Los entusiastas y los escépticos se preguntan: ¿qué existe realmente más allá del velo de lo conocido? Mientras persiste la búsqueda de respuestas, los estudiantes y los científicos permanecen comprometidos, listos para descubrir más pistas sobre este notable ser momificado que se extiende a horcajadas en la línea entre la realidad y el mito.
