Marcus Rashford llegó al FC Barcelona con grandes expectativas de convertirse en la nueva estrella del ataque, pero tras tres jornadas de La Liga, el delantero inglés aún no ha logrado dejar una huella significativa, lo que ha generado dudas entre los aficionados y la prensa sobre su capacidad para adaptarse al equipo culé. Su rendimiento, hasta ahora, ha estado lejos de lo esperado, y el empate 1-1 contra el Rayo Vallecano en la tercera jornada de La Liga ha puesto en evidencia los problemas que enfrenta el exjugador del Manchester United.
El partido disputado en la madrugada del 1 de septiembre en el estadio de Vallecas fue un reflejo de las dificultades del Barcelona para imponer su juego. A pesar de ser los campeones defensores y contar con una plantilla repleta de talento, los culés no lograron superar a un Rayo Vallecano combativo y bien organizado. Lamine Yamal abrió el marcador para el Barcelona en el minuto 40 con un penalti bien ejecutado, pero en el 67, Perez igualó el encuentro para los locales. El resultado dejó al Barcelona con un punto que sabe a poco, evidenciando problemas en el ataque, donde Rashford no pudo marcar la diferencia.
Ingresado en el segundo tiempo en lugar de Raphinha, Rashford tenía la misión de aportar frescura y explosividad al ataque blaugrana. Sin embargo, en los casi 30 minutos que estuvo en el campo, su impacto fue prácticamente nulo. Según las estadísticas, solo tocó el balón 15 veces, completó 7 pases y logró un regate exitoso. No disparó al arco ni creó oportunidades para sus compañeros, lo que dejó al Barcelona sin la chispa necesaria para romper el empate. La página Goal le otorgó una calificación de apenas 5 puntos, un reflejo de su actuación decepcionante.
Tras las tres primeras jornadas de La Liga, Rashford aún no ha registrado goles ni asistencias con la camiseta del Barcelona. En contraste, jugadores como Lamine Yamal, Raphinha y Ferran Torres ya han contribuido directamente en los goles del equipo. Esta diferencia ha generado críticas y ha aumentado la presión sobre el delantero inglés, quien llegó al club con la esperanza de ser un refuerzo clave tras su paso por el Manchester United.
Durante la pretemporada, Rashford mostró destellos de su calidad al marcar un gol y dar una asistencia, lo que generó optimismo sobre su adaptación. Sin embargo, en la temporada oficial, donde los rivales son más organizados y físicamente exigentes, el inglés ha tenido problemas para encontrar su lugar en el esquema de Hansi Flick. Su falta de conexión con el estilo de juego del Barcelona, basado en la posesión y la presión alta, ha sido evidente, y su rendimiento no ha cumplido con las expectativas de un club que invirtió en él para reforzar su ataque.
La llegada de Rashford al Barcelona no solo buscaba fortalecer la delantera, sino también compartir la responsabilidad ofensiva con jóvenes talentos como Yamal. Sin embargo, su lento proceso de adaptación ha generado dudas sobre su capacidad para competir por un puesto titular en un equipo con tantas opciones ofensivas. La prensa inglesa también ha expresado preocupación, preguntándose si Rashford podrá recuperar el nivel que mostró en el Manchester United, donde fue una figura clave con goles decisivos.
Recientemente, el seleccionador inglés Thomas Tuchel convocó a Rashford para los próximos partidos de la selección durante los FIFA Days. Esta oportunidad podría ser crucial para que el delantero recupere confianza y regrese a Barcelona con un mejor estado anímico. Si logra destacar con Inglaterra, podría traer ese impulso a La Liga. Por el contrario, un desempeño pobre en la selección podría agravar su situación en el club, donde tanto Flick como los aficionados comienzan a impacientarse.
El empate contra el Rayo Vallecano dejó claro que el Barcelona necesita más consistencia en su ataque para mantenerse en la lucha por el título de La Liga. Hansi Flick, conocido por su exigencia táctica, espera que Rashford dé un paso adelante, no solo con goles, sino también con una mayor implicación en el juego colectivo y presión sobre las defensas rivales. El técnico alemán sabe que el potencial de Rashford es innegable, pero su adaptación al estilo del Barcelona requiere tiempo y esfuerzo.
La presión sobre Rashford es enorme. Jugar en el Barcelona implica cumplir con un estándar de excelencia, ya que los aficionados están acostumbrados a delanteros legendarios como Ronaldinho, Eto’o o Messi. Hasta ahora, Rashford no ha estado a la altura de esas expectativas, y su falta de impacto ha generado críticas. Sin embargo, con solo tres jornadas disputadas, aún hay tiempo para que el inglés demuestre su valía. La clave estará en su capacidad para adaptarse al sistema de Flick, mejorar su condición física y ser más efectivo en el área.
El parón internacional será una oportunidad para que Rashford reflexione y trabaje en su confianza. Inglaterra ha sido históricamente un entorno donde el delantero ha brillado, y un buen desempeño con la selección podría ser el impulso que necesita para cambiar su dinámica en el Barcelona. Si logra marcar o asistir, podría regresar a La Liga con una mentalidad renovada.
El caso de Rashford también pone de manifiesto los desafíos que enfrentan muchos jugadores de la Premier League al llegar a La Liga. La diferencia en el ritmo, la táctica y el estilo de juego puede ser un obstáculo significativo, pero con su experiencia y talento, Rashford tiene las herramientas para superarlo. La paciencia y el trabajo duro serán fundamentales para que encuentre su lugar en el equipo.
Para el Barcelona, el desafío en el ataque persiste. Aunque Yamal está emergiendo como una estrella, y Raphinha y Torres han mostrado destellos de calidad, el equipo necesita más opciones para sostener una temporada larga. Rashford, como una de las apuestas del club, tiene la oportunidad de convertirse en una pieza clave, pero su futuro en el Camp Nou dependerá de su capacidad para superar esta fase complicada y demostrar que puede ser el delantero que el Barcelona esperaba.