Escándalo en la Fórmula 1! Red Bull en crisis después de la partida de Checa Pérez y rumores sobre Verstappen.
La Fórmula 1 está experimentando uno de sus períodos más tumultuosos en 2025, y Red Bull está en el centro de la tormenta. La partida de Sergio “Checo” de Pérez del equipo austriaco, la sorprendente falta de competitividad de Yuki Tsunoda, y los rumores del posible interés de Mercedes en Max Verstappen han desencadenado un torbellino de especulaciones que está sacudiendo profundamente al campeón. ¿Qué está pasando realmente en Milton Keynes? La respuesta puede cambiar el curso de la temporada.
La decisión de Red Bull de deshacerse del checo Pérez, con un año restante de contrato, demostró ser un error monumental. El piloto mexicano, conocido por su consistencia y capacidad para obtener puntos cruciales, fue reemplazado inicialmente por Liam Lawson, quien duró solo dos carreras antes de ser despedidas por falta de rendimiento. Yuki Tsunoda se hizo cargo, pero sus actuaciones fueron decepcionantes. Con solo siete puntos en ocho carreras, el piloto japonés está lejos de hacer coincidir a Verstappen, dejando a Red Bull en una posición débil en el campeonato de constructores. Check Shadow continúa persiguiendo al equipo, y cada carrera parece demostrar que su renuncia fue una apuesta fallida.
El consultor de Red Bull Sports, Helmut Marko, fue uno de los principales objetivos de esta decisión. Durante años, Marko ha criticado a Pérez públicamente, incluso en su apogeo, mientras ahora defiende a Tsunoda con un tono mucho más suave. Este tratamiento desigual atrajo críticas dentro y fuera del paddock, y muchos creían que la salida del checo era más personal que deportivo. El jefe del equipo, Christian Horner, también trató de justificar la partida de Tsunoda, enfatizando que el piloto japonés necesitaba tiempo para adaptarse. Sin embargo, las palabras de Horner parecen cada vez más convincentes, especialmente cuando comparamos el rendimiento actual con los 85 puntos acumulados por Pérez en las primeras cinco carreras de 2024.
Mientras Red Bull lucha por estabilizar su segunda posición, los rumores sobre el futuro de Max Verstappen arrojan más madera al fuego. Fuentes cercanas a la Fórmula 1 sugieren que Mercedes, en su búsqueda de un piloto estrella para liderar su proyecto, está mirando al campeón mundial de cuatro tiempos. La idea de Verstappen dejó a Red Bull parecía impensable hace unos meses, pero la inestabilidad del equipo, combinada con figuras clave como Adrian Newey, allanó el camino para especular. Verstappen, visiblemente frustrado después de un gran premio desastroso de España, en el que marcó solo un punto, no negó estos rumores, que generaron alarma dentro del equipo austriaco.
La crisis de Red Bull no se limita a los resultados en la pista. Internamente, el equipo se ve fragmentado. La relación entre Horner y Marko ha estado tensa durante años, y la partida de Pérez exacerbó las divergencias. Si bien Horner insiste en que el problema radica en el desarrollo del automóvil, Marko parece más centrado en encontrar un piloto que no busque competir directamente con Verstappen. Esta falta de cohesión llevó a Red Bull a un punto crítico, con McLaren, Ferrari y Mercedes acercándose al campeonato.
En medio de este caos, la figura de Checo Pérez continúa resonando. Desde su partida, el mexicano se ha mantenido discreto, pero su legado en Red Bull es innegable. Con victorias históricas como Monaco’s en 2022 y un papel clave en los títulos de constructores 2022 y 2023, Pérez demostró que es mucho más que un solo compañero de equipo de Verstappen. Ahora, con los rumores de un posible regreso a la Fórmula 1 con otro equipo, como Cadillac, los fanáticos se preguntan si Red Bull alguna vez admitirá su error.
La temporada 2025 está lejos de terminar, pero Red Bull enfrenta un desafío sin precedentes. La negativa de Checo a regresar, el rendimiento debajo de Tsunoda esperaba, y el interés de Mercedes en Verstappen es solo la punta del iceberg. ¿El equipo recuperará su dominio o estamos presenciando el final de una época? La Fórmula 1 nunca ha sido tan impredecible, y los próximos grandes premios prometen ser emocionante.