Laurent Mekies señala el gran fallo de Christian Horner en Red Bull
La Fórmula 1 es un mundo donde los detalles marcan la diferencia, y la reciente salida de Christian Horner de Red Bull Racing ha desatado un torbellino de especulaciones y análisis. El anuncio, que tomó por sorpresa a los aficionados el 9 de julio de 2025, marcó el fin de una era para el equipo que dominó la categoría bajo el liderazgo de Horner durante dos décadas. Su reemplazo, Laurent Mekies, exjefe de Racing Bulls, asumió el cargo de director del equipo y CEO con efecto inmediato, y ya ha comenzado a señalar lo que considera uno de los mayores errores de su predecesor. Este cambio no solo ha sacudido los cimientos de Red Bull, sino que también ha avivado las discusiones sobre el futuro del equipo y de su estrella, Max Verstappen. ¿Qué falló en la gestión de Horner, y cómo planea Mekies enderezar el rumbo?

El despido de Horner, tras 20 años al frente de Red Bull Racing, no fue una decisión tomada a la ligera. Durante su mandato, el equipo logró ocho campeonatos de pilotos y seis de constructores, acumulando 124 victorias y más de 8,000 puntos en el campeonato mundial. Sin embargo, la temporada 2025 ha sido un punto de inflexión. Red Bull, que alguna vez fue imbatible, ha caído al cuarto lugar en el campeonato de constructores, con solo dos victorias en 12 carreras. Max Verstappen, el cuatro veces campeón del mundo, ha visto su dominio disminuir, quedando 69 puntos por detrás del líder, Oscar Piastri, tras un decepcionante quinto lugar en el Gran Premio de Gran Bretaña. La presión interna, las controversias fuera de la pista y la salida de figuras clave como Adrian Newey y Jonathan Wheatley han contribuido a un ambiente de inestabilidad.
Laurent Mekies, en su nuevo rol, no ha tardado en identificar lo que considera uno de los mayores fallos de Horner. En una entrevista publicada por Red Bull tras su nombramiento, Mekies destacó la importancia de centrarse en las personas dentro del equipo, describiéndolas como “las mejores del mundo en lo que hacen”. Sin embargo, según fuentes cercanas al equipo, Mekies ha señalado que Horner, en sus últimos años, se enfocó demasiado en las responsabilidades externas, como el desarrollo de la unidad de potencia para 2026, en detrimento de la gestión del equipo de carreras. Este punto de vista resuena con las palabras del periodista Lawrence Barretto en el podcast F1 Nation, quien sugirió que la carga de liderar el proyecto de motores de Red Bull, en colaboración con Ford, fue una distracción significativa para Horner. “Esa responsabilidad podría ser demasiado para Mekies también”, advirtió Barretto, subrayando la magnitud del desafío que enfrenta el nuevo jefe.
La salida de Horner también ha sido vinculada a tensiones internas, particularmente con el entorno de Max Verstappen. Según el comentarista Martin Brundle en The F1 Show de Sky Sports, “el campamento Verstappen ha estado lanzando granadas de mano durante meses”, refiriéndose a las críticas abiertas de Jos Verstappen, padre de Max, hacia Horner. Brundle sugirió que estas tensiones, combinadas con la pérdida de figuras clave como Newey, llevaron a los directivos de Red Bull a cuestionar si Horner era el hombre adecuado para liderar al equipo hacia la nueva era de regulaciones en 2026. Motorsport Italia informó que Verstappen tuvo un “enfrentamiento final” con el CEO de Red Bull, Oliver Mintzlaff, lo que precipitó la decisión de despedir a Horner.
Mekies, con su vasta experiencia en la Fórmula 1, parece ser una elección lógica para suceder a Horner. Su trayectoria incluye roles como ingeniero de carrera en Minardi, director de seguridad en la FIA y director deportivo en Ferrari, antes de liderar Racing Bulls desde 2023. En este último rol, Mekies demostró su capacidad para revitalizar un equipo, trabajando junto al CEO Peter Bayer para establecer una dirección clara para la escudería hermana de Red Bull. En una declaración a Reuters, Mekies reconoció los “grandes desafíos” que le esperan, pero también expresó su admiración por el equipo, afirmando que lo ve como “el más afilado” de la parrilla, incluso desde su perspectiva como competidor previo.
Sin embargo, no todos están convencidos de que Mekies pueda llenar los zapatos de Horner. Gerhard Berger, ex piloto y propietario de equipo, expresó sus dudas en Planet F1, cuestionando si Mekies tiene lo necesario para prosperar al más alto nivel de la Fórmula 1. Estas preocupaciones se ven amplificadas por el hecho de que Mekies asume el cargo en un momento crítico, con Red Bull enfrentando no solo un rendimiento irregular en la pista, sino también rumores sobre una posible salida de Verstappen a Mercedes. El piloto holandés, frustrado por el desempeño del RB21, ha descrito el auto como “inconducible” tras el Gran Premio de Gran Bretaña, según informó F1 Oversteer. Con su contrato hasta 2028, pero con rumores de cláusulas de salida, la incertidumbre sobre su futuro es un desafío adicional para Mekies.
Otro aspecto que Mekies deberá abordar es la relación entre Red Bull Racing y Racing Bulls. Su nombramiento ha reavivado preocupaciones sobre la dinámica entre los dos equipos bajo el paraguas de Red Bull, especialmente después de que Mekies criticara a Horner por la gestión del escándalo del límite de costos de 2021, cuando estaba en Ferrari. En ese momento, Mekies afirmó que Red Bull se había librado con una sanción ligera, una opinión que ahora resuena con ironía dado su nuevo rol. Su experiencia en la FIA y su conocimiento de Ferrari podrían ser ventajas estratégicas, pero también generan preguntas sobre cómo manejará las complejidades de liderar un equipo que históricamente ha explotado al máximo las regulaciones de la Fórmula 1.
El próximo Gran Premio de Bélgica, el 27 de julio, será la primera prueba de fuego para Mekies como jefe de Red Bull Racing. Con el equipo en una posición vulnerable y la amenaza de perder a Verstappen, su capacidad para unificar al equipo y optimizar el rendimiento será crucial. La salida de Horner, aunque impactante, podría ser el catalizador que Red Bull necesita para reinventarse de cara a 2026, cuando las nuevas regulaciones de chasis y unidades de potencia podrían redefinir la jerarquía de la Fórmula 1. Mekies, con su enfoque en las personas y su experiencia técnica, tiene la oportunidad de escribir un nuevo capítulo en la historia de Red Bull, pero el camino no será fácil.
La pregunta que queda en el aire es si Mekies podrá superar las expectativas y devolver a Red Bull a la cima, o si las sombras de Horner y las tensiones internas seguirán pesando sobre el equipo. Los aficionados, mientras tanto, observan con una mezcla de curiosidad y expectación, ansiosos por ver cómo este cambio transformará el panorama de la Fórmula 1. Lo que está claro es que, en un deporte donde cada decisión cuenta, Laurent Mekies tiene ante sí la oportunidad de su vida, y el mundo entero estará atento a sus próximos pasos.