Christian Horner y Bernie Ecclestone podrían convertirse en propietarios de Alpine
El mundo de la Fórmula 1 siempre ha sido un hervidero de rumores, especulaciones y movimientos estratégicos que mantienen a los aficionados al borde de sus asientos. Sin embargo, pocas noticias han generado tanta expectación como la posibilidad de que Christian Horner, recientemente despedido de Red Bull, y el legendario Bernie Ecclestone, exmagnate de la F1, se conviertan en propietarios parciales del equipo Alpine, valorado en 1.200 millones de libras. Esta hipótesis, que ha surgido de los murmullos en el paddock, promete sacudir el panorama de la Fórmula 1 y plantea preguntas intrigantes sobre el futuro de uno de los equipos más emblemáticos del deporte.

La noticia de la salida de Christian Horner de Red Bull tras 20 años al frente del equipo fue un terremoto en el mundo del automovilismo. Durante su mandato, Horner transformó a Red Bull de un equipo debutante en 2005 a una potencia dominante, logrando ocho títulos de pilotos y seis de constructores. Sin embargo, tras una temporada 2025 complicada, con un coche poco competitivo y rumores sobre la posible salida de Max Verstappen, Red Bull decidió prescindir de sus servicios, reemplazándolo por Laurent Mekies, exjefe del equipo Racing Bulls. La decisión sorprendió a muchos, pero no tanto como los rumores que han surgido sobre los próximos pasos de Horner en la F1.
Según el comentarista holandés y experto en F1, Nelson Valkenburg, en una intervención en el podcast The Race F1, Horner no estaría buscando simplemente un nuevo rol como jefe de equipo, sino algo mucho más ambicioso: convertirse en propietario de un equipo. Valkenburg afirmó: “Lo que más desea es ser dueño de un equipo. Siento que le encantaría poseer un equipo, y ese equipo está parcialmente a la venta. Hay rumores en el paddock de que, con cierto respaldo, tal vez del propio Bernie Ecclestone, podría convertirse al menos en propietario de una participación minoritaria en Alpine”. Estas palabras han desatado una ola de especulaciones sobre una posible alianza entre Horner y Ecclestone, dos figuras que han dejado una huella imborrable en la Fórmula 1.

Bernie Ecclestone, a sus 94 años, sigue siendo una figura influyente en el deporte, a pesar de no ocupar un cargo oficial desde que dejó de ser el jefe de la F1 en 2017. Su relación con Horner se remonta a los primeros días de Red Bull en la parrilla, cuando Ecclestone, entonces al mando del deporte, apoyó el proyecto de la marca de bebidas energéticas. Este vínculo histórico se ha fortalecido con el tiempo, y la reciente aparición de Ecclestone en el paddock, incluyendo su participación en una reunión de la Comisión de F1 a invitación de Horner para discutir las regulaciones de 2026, ha alimentado las especulaciones sobre su posible colaboración en un proyecto tan audaz como la adquisición de Alpine.
El equipo Alpine, propiedad de Renault, atraviesa un momento de incertidumbre. Con la salida inminente del CEO de Renault, Luca de Meo, y la llegada de Flavio Briatore como asesor ejecutivo, el equipo francés está en búsqueda de una nueva dirección estratégica. Briatore, otro viejo conocido de Horner y Ecclestone, ha expresado interés en revitalizar Alpine, que actualmente languidece en la parte baja de la clasificación de constructores. La posibilidad de que Horner y Ecclestone inviertan en el equipo, junto con la experiencia de Briatore, crea una narrativa fascinante: tres titanes de la F1 uniendo fuerzas para devolver a Alpine a la cima.
Sin embargo, no todos están convencidos de que este movimiento sea sencillo. Karun Chandhok, ex piloto y comentarista de Sky Sports, sugirió que Alpine podría ser una opción lógica para Horner debido a su ubicación en Enstone, que le permitiría mantener su base en el Reino Unido. “¿Podría ir a Alpine y seguir viviendo en el Reino Unido? Alpine está basado en el valle del automovilismo y está buscando un jefe de equipo. Christian es viejo amigo de Flavio Briatore. Esa podría ser una posible destinación”, comentó Chandhok. Sin embargo, también descartó un movimiento hacia Ferrari, a pesar de los rumores previos que vinculaban a Horner con el equipo italiano. “Puedo verlo aterrizando en Alpine más que en Ferrari ahora”, añadió, señalando factores personales y logísticos que podrían influir en la decisión de Horner.
Por otro lado, la salida de Horner de Red Bull no ha estado exenta de controversia. Martin Brundle, otra voz respetada en la F1, insinuó en el podcast The F1 Show de Sky Sports que el “equipo Verstappen” tuvo un papel significativo en la destitución de Horner, sugiriendo tensiones internas en Red Bull. “El equipo Verstappen no estaba contento con que Horner liderara el equipo”, afirmó Brundle, aunque aclaró que los detalles exactos de lo sucedido tras bambalinas siguen siendo un misterio. Esta revelación añade una capa de intriga a la narrativa, ya que la posible salida de Verstappen de Red Bull podría estar vinculada a los movimientos de Horner hacia Alpine.
La idea de que Horner y Ecclestone adquieran una participación en Alpine también ha generado debates sobre el impacto financiero y estratégico de esta operación. Alpine, valorado en 1.200 millones de libras, ya cuenta con inversores de alto perfil como Ryan Reynolds, Patrick Mahomes y Rory McIlroy. La entrada de Horner y Ecclestone podría proporcionar no solo capital, sino también una experiencia incomparable en la gestión y promoción del deporte. Ecclestone, en particular, es conocido por su habilidad para cerrar acuerdos y transformar la Fórmula 1 en el espectáculo global que es hoy. En una entrevista con The Telegraph, Ecclestone comentó sobre Horner: “Muy pocos ejecutivos pueden hacer todo, desde ingeniería hasta relaciones públicas. Él dirigía la empresa como creía que debía hacerse. Durante mucho tiempo, la gente estuvo dispuesta a aceptar eso porque estaba haciendo el trabajo”. Estas palabras reflejan la confianza de Ecclestone en la capacidad de Horner para liderar un proyecto tan ambicioso como la reestructuración de Alpine.
Para los aficionados, esta posible alianza plantea un escenario emocionante. La combinación de la visión estratégica de Horner, el instinto comercial de Ecclestone y la experiencia de Briatore podría transformar a Alpine en un contendiente serio. Sin embargo, también existen desafíos. La salida de Luca de Meo y las dificultades de Alpine para encontrar un rumbo claro en la pista sugieren que cualquier nuevo propietario enfrentará una tarea ardua. Además, la incorporación de figuras tan polarizantes como Horner y Ecclestone podría generar reacciones mixtas en el paddock y entre los aficionados.
A medida que la temporada 2025 avanza hacia su receso de verano, los ojos del mundo de la F1 estarán puestos en Alpine y en los movimientos de Horner y Ecclestone. ¿Podrán estos dos gigantes del automovilismo unir fuerzas para revitalizar un equipo en apuros? ¿O son estos rumores simplemente otro capítulo en la interminable saga de especulaciones que define a la Fórmula 1? Solo el tiempo lo dirá, pero una cosa es segura: la posibilidad de ver a Christian Horner y Bernie Ecclestone como propietarios de Alpine ha encendido la imaginación de los aficionados y promete mantener el paddock en vilo en las próximas semanas.