El Gran Cañón, una majestuosa maravilla natural que cautiva a millones de visitantes cada año, aparentemente esconde muchos más secretos de lo que se creía. Durante una reciente expedición arqueológica, investigadores descubrieron esqueletos gigantescos en las profundidades del cañón que no solo asombran por su tamaño, sino que también han suscitado un nuevo debate sobre la historia de Norteamérica .
Según el equipo de geólogos y arqueólogos que realizó el descubrimiento, los restos óseos se encontraron en una formación cavernosa previamente inexplorada en las zonas más remotas del Gran Cañón. Las mediciones iniciales indican que algunos esqueletos podrían haber alcanzado los 3,5 metros de altura , una altura significativamente mayor que la de los humanos prehistóricos promedio.
La identidad de estas gigantescas criaturas es actualmente objeto de debate científico. Algunos investigadores sospechan que podrían ser los restos de un ancestro homínido previamente desconocido. Otros especulan sobre interpretaciones míticas: las leyendas de diversos pueblos indígenas, como los hopi y los zuñi, han hablado durante siglos de “gigantes” que vivieron en la región y habitaron profundas cuevas subterráneas.
El Dr. Samuel Klein, uno de los arqueólogos principales de la expedición, comentó:
«Nos encontramos ante un descubrimiento que podría redefinir no solo la importancia geológica, sino también la cultural del Gran Cañón. El tamaño y la disposición de los esqueletos indican un entierro organizado, que posiblemente representa a un pueblo entero».
La cueva donde se descubrieron los esqueletos había estado sellada durante miles de años por un deslizamiento de tierra. Solo un proyecto de prospección sísmica fortuito para evaluar la estabilidad de la región redescubrió la entrada. Los hallazgos ya han sido transportados bajo estrictas medidas de seguridad a un laboratorio de investigación, donde se están datando y analizando con métodos de vanguardia.
El descubrimiento no solo ha electrizado a los círculos científicos, sino que también ha despertado el interés de aficionados a la historia y aventureros de todo el mundo. Muchos lo ven como una prueba de que aún no lo sabemos todo sobre nuestro pasado y de que el Gran Cañón podría albergar la clave de civilizaciones olvidadas .