El Gran Premio de Canadá deparó una emocionante batalla entre George Russell y Max Verstappen, pero tras la carrera, lo que más llamó la atención fue un polémico incidente bajo el coche de seguridad. Red Bull presentó una protesta contra la victoria de Russell, calificando su comportamiento al volante de “ilegal” y antideportivo. Tras una larga deliberación, los comisarios de la FIA rechazaron la protesta, pero George Russell recibió una sanción por sus acciones. Esta es una buena noticia para Max Verstappen, quien conserva su segundo puesto, mientras que el jefe de equipo Mercedes, Toto Wolff, compartió su visión de la situación.
La carrera en el circuito Gilles Villeneuve estuvo dominada por Russell, quien partió desde la pole position y conservó el liderato. Verstappen lo siguió en segundo lugar, pero no representó una amenaza seria para el piloto de Mercedes. El drama comenzó entonces con una colisión entre los McLaren de Lando Norris y Oscar Piastri, lo que provocó la entrada del coche de seguridad en la pista en la fase final. Durante este periodo, Russell frenó bruscamente el neumático derecho, por lo que Verstappen se acercó a él e incluso lo reemplazó. Verstappen se quejó inmediatamente de la radio de a bordo: «George frenó bruscamente de repente». Su ingeniero de carreras, Gianpiero Lambiase, respondió que investigarían el incidente por un posible comportamiento irregular al volante.
El propio Russell tampoco se quedó callado e informó por radio que Verstappen había alcanzado el coche de seguridad, lo que podría constituir una infracción del reglamento. Parecía un intento deliberado de meter en problemas a Verstappen, sobre todo porque el holandés ya acumula once puntos de penalización y un punto extra significaría una suspensión. Lambiase advirtió a Verstappen: «El incidente con Russell ya se puede ver en las imágenes, Max, es bastante claro. No te dejes arrastrar a este juego, ¿vale?».
Tras horas de consulta, los comisarios rechazaron la protesta de Red Bull, concluyendo que la conducta de Russell al volante no era ilegal. Sin embargo, Russell recibió una advertencia oficial por su abrupta maniobra de reposición, considerada potencialmente peligrosa. Además, Russell, junto con Kimi Antonelli y Oscar Piastri, fueron advertidos sobre la posibilidad de recuperarse tras la meta bajo la supervisión del SafetyCar, pero esto no implicó ninguna sanción adicional. Esto significa que Russell conserva su victoria, pero la advertencia sirve como recordatorio de que sus acciones fueron arriesgadas. Buenas noticias para Verstappen: su segundo puesto se mantiene intacto y no recibe puntos de penalización adicionales, lo que le permite evitar una suspensión.
Toto Wolff, jefe del equipo Mercedes, respondió al incidente con un tono moderado, algo inusual considerando sus frecuentes opiniones. “Solo supe después de la carrera que le pidieron a Max que dejara pasar a George; no lo sabía”, declaró Wolff a los medios, incluido Racingnews365. “Durante la carrera, pensamos que Max tenía un problema con su coche, por eso iba tan lento en la curva 4”. Wolff criticó duramente a Verstappen, pero sugirió que si el incidente fue una acción consciente, no sería aceptable. “Si fue por enfado, lo cual no puedo imaginar porque fue demasiado evidente, entonces no es bueno. Pero no sé qué planeaba Max. ¿Quería que George lo pasara y lo alcanzara inmediatamente?”
La reacción de Wolff refleja su visión más amplia de deportistas de élite como Verstappen. Señaló que «los grandes campeones a veces piensan que el mundo está en su contra, lo que los impulsa a rendir al máximo nivel». Añadió: «A veces no se dan cuenta de que ellos mismos han cometido un error. Hacía años que no veíamos este tipo de momentos en Max, así que no sé de dónde viene». Estos comentarios sugieren que Wolff Verstappen lo comprende, pero enfatizó que Mercedes sigue centrado en su propio rendimiento.
El anuncio de la FIA y la advertencia a Russell ponen fin a un Gran Premio tumultuoso desde Canadá. Para Verstappen, esto supone un alivio, mientras continúa su lucha por el campeonato. Sin embargo, la rivalidad entre Russell y Verstappen sigue siendo fuente de tensión, y con las próximas carreras en Europa, el mundo de la Fórmula 1 seguirá de cerca la evolución de esta dinámica.