El 7 de junio de 2025, un momento explosivo sacudió el set de “The View” cuando Whoopi Goldberg, en un acalorado debate, llamó a Elon Musk “bastardo” frente a la audiencia en vivo. La inesperada declaración, que ocurrió durante una discusión sobre la reciente compra de ABC por parte de Musk por 790 millones de dólares, dejó al estudio en silencio. Goldberg criticaba la decisión de Musk de cancelar “The View” tras un altercado con Robert De Niro, cuando sus emociones desbordaron, provocando el insulto. La reacción de Musk, quien estaba siendo entrevistado vía enlace remoto, fue inmediata y sorprendió a todos.

Musk, visiblemente desconcertado, respondió con calma pero con firmeza: “Whoopi, esperaba más de ti. Hablemos de hechos, no de insultos”. Su compostura contrastó con la tensión en el estudio, donde las copresentadoras Joy Behar y Sara Haines intentaron suavizar la situación. Goldberg, reconociendo el impacto de sus palabras, emitió una disculpa inmediata en el programa, diciendo: “Me dejé llevar por el calor del momento. No debí decir eso, y lo lamento profundamente”. Sin embargo, el incidente ya se había viralizado en X, con hashtags como #WhoopiVsMusk y #TheViewDrama generando millones de interacciones.
El altercado se produce en un contexto de creciente tensión entre Musk y el elenco de “The View”, tras su anuncio de reestructurar la programación de ABC para alinear los contenidos con su visión de “transparencia”. Los espectadores están divididos: algunos aplauden a Goldberg por su franqueza, mientras que otros la critican por falta de profesionalismo. En X, Musk insinuó que el incidente refuerza su decisión de cancelar el programa, escribiendo: “El drama de hoy confirma que es hora de un cambio”.
Organizaciones de medios han expresado preocupación por el futuro de la libertad editorial bajo la influencia de Musk. Mientras tanto, la disculpa de Goldberg no ha calmado las aguas, y analistas predicen que este episodio podría acelerar los planes de Musk para reformar ABC. El enfrentamiento, que captó la atención nacional, subraya las profundas divisiones culturales y mediáticas en Estados Unidos, dejando a los fans de “The View” preguntándose qué sigue para el icónico programa y su carismática presentadora.