Ousmane Dembélé, el electrificante extremo del Paris Saint-Germain, ha enviado un mensaje contundente al FC Barcelona antes de la gran final de la Champions League contra el Inter de Milán. En una declaración que ha sacudido las redes sociales y emocionado a los culés, el francés no solo expresó su respeto por su antiguo club, sino que también hizo una promesa especial dirigida al entrenador Hansi Flick y al joven prodigio Lamine Yamal: derrotar al Inter para “vengar” al Barcelona.
El contexto de esta promesa tiene raíces profundas. El Barcelona, eliminado en rondas previas de esta edición de la Champions, no logró alcanzar la final, y muchos aficionados culés aún recuerdan con amargura las derrotas históricas ante equipos italianos, incluido el Inter. Dembélé, quien pasó seis años en el Camp Nou, parece decidido a saldar cuentas en nombre de su exequipo. “Barcelona siempre estará en mi corazón. Sé lo que significa para los culés enfrentarse al Inter, y voy a darlo todo para ganar esta final”, afirmó el jugador en una entrevista reciente.
El mensaje de Dembélé no solo es un guiño nostálgico, sino también un desafío personal. Desde su llegada al PSG, el francés ha mostrado un nivel estelar, consolidándose como uno de los mejores extremos del mundo. Con su velocidad, regate y capacidad para desequilibrar defensas, Dembélé promete ser una pesadilla para la zaga del Inter, liderada por Alessandro Bastoni. “Voy a jugar como si aún llevara la camiseta blaugrana. Esta victoria será para los aficionados del Barça, para Hansi Flick, que me dio confianza, y para Lamine, el futuro del club”, añadió con determinación.
Hansi Flick, actual técnico del Barcelona, ha transformado al equipo en un contendiente formidable en LaLiga, pero la Champions sigue siendo una asignatura pendiente. Dembélé, quien trabajó brevemente con Flick, parece motivado por la idea de rendir homenaje al estratega alemán. Por otro lado, su mención a Lamine Yamal, la joya de 17 años que está revolucionando el fútbol español, añade un toque emotivo. “Yamal es como un hermano pequeño. Quiero que vea que podemos ganar por él y por el futuro del Barça”, comentó Dembélé, mostrando una conexión especial con la cantera culé.
El Inter, vigente campeón de la Serie A, no será un rival fácil. Con jugadores como Lautaro Martínez y Hakan Çalhanoğlu, los nerazzurri son un equipo compacto y letal. Sin embargo, Dembélé confía en que el PSG, con su arsenal ofensivo liderado por él mismo y Kylian Mbappé, puede imponerse en el escenario más grande de Europa. “Sé que el Inter es fuerte, pero nosotros también. Vamos a pelear hasta el final”, sentenció.
Los aficionados del Barcelona, aunque no estarán en la final, seguirán de cerca el partido, animando a su antiguo héroe. La promesa de Dembélé no solo
