En el vertiginoso mundo de la Fórmula 1, los rumores y las especulaciones son tan rápidos como los monoplazas en la pista. Esta vez, el foco está puesto en el joven talento argentino Franco Colapinto, quien, tras su sorprendente debut con Williams en 2024, ha captado la atención de equipos, patrocinadores y fanáticos por igual. Sin embargo, una noticia reciente ha encendido las alarmas: según fuentes cercanas al paddock, el contrato de Colapinto con Alpine, su nuevo equipo, incluye una cláusula secreta que podría garantizarle competir durante toda la temporada 2025, un giro inesperado que sacude las expectativas de la categoría.
Colapinto, de tan solo 21 años, irrumpió en la Fórmula 1 como piloto de Williams en las últimas nueve carreras de la temporada pasada, reemplazando a Logan Sargeant. Su desempeño, que incluyó sumar puntos en Azerbaiyán y Austin, no pasó desapercibido. A pesar de ello, Williams ya había asegurado a Carlos Sainz y Alex Albon para 2025, dejando a Colapinto sin un asiento titular. Fue entonces cuando Alpine, liderado por el astuto Flavio Briatore, movió sus fichas para asegurarse al argentino como piloto reserva. Pero lo que parecía un rol secundario podría convertirse en algo mucho más grande gracias a esta misteriosa cláusula.
El periodista británico Nate Saunders, en el podcast Unlapped de ESPN, reveló que el contrato de Colapinto incluiría un inciso que obligaría a Alpine a darle un asiento oficial en algún momento de la temporada 2025. Aunque Saunders aclaró que se trata de un rumor, señaló que la influencia de Briatore, conocido por su implacable toma de decisiones, podría ser clave. El italiano, quien regresó a Alpine como asesor ejecutivo, ha apostado fuerte por Colapinto, viéndolo como un “diamante en bruto” desde su debut en Monza. Este respaldo no es menor, considerando que Briatore fue quien descubrió talentos como Michael Schumacher y Fernando Alonso.
La situación dentro de Alpine añade más intriga. Jack Doohan, el piloto titular junto a Pierre Gasly, enfrenta una presión enorme. Según informes, Doohan tendría garantizadas solo las primeras cinco carreras de la temporada (Australia, China, Japón, Baréin y Arabia Saudita). Si no logra resultados sólidos, Colapinto, quien ya demostró ser más rápido que el australiano en pruebas privadas en Barcelona, podría tomar su lugar. En esos tests, el argentino marcó tiempos entre dos y cinco décimas por vuelta más rápidos que Doohan, según el medio F1actu.com, alimentando las especulaciones de un cambio inminente.
Por si fuera poco, el acuerdo entre Alpine y Williams añade otra capa de complejidad. James Vowles, jefe de Williams, ha insinuado que la salida de Colapinto no es definitiva, sugiriendo que el equipo británico podría “repescarlo” en 2027 si Alpine no le ofrece un asiento titular. Según el medio Crash, esto formaría parte de una cesión de cinco años, confirmada por la mánager de Colapinto, María Catarineu. Esta cláusula de retorno, combinada con la posibilidad de competir en 2025, posiciona a Colapinto en un escenario único: es un piloto codiciado, pero su futuro depende de múltiples factores.
El impacto de Colapinto trasciende lo deportivo. Su carisma y conexión con los fanáticos, especialmente en Argentina, han atraído a patrocinadores de peso, lo que refuerza su valor para Alpine. Mientras el joven piloto trabaja en el simulador y en pruebas con autos de temporadas pasadas, el mundo de la Fórmula 1 no le quita los ojos de encima. ¿Será 2025 el año en que Colapinto se consolide como una estrella de la categoría? Solo el tiempo, y las decisiones de Briatore, lo dirán. Por ahora, esta cláusula oculta mantiene viva la esperanza de verlo brillar en la pista durante toda la temporada.
