Jack Doohan, el joven piloto australiano, finalmente rompió el silencio tras ser reemplazado por el argentino Franco Colapinto en la escudería Alpine de Fórmula 1, un movimiento que ha sacudido el paddock y generado titulares en todo el mundo. La noticia, confirmada el 7 de mayo de 2025, marca un punto de inflexión en la temporada, con Colapinto asumiendo el asiento titular a partir del Gran Premio de Emilia-Romaña en Imola, programado para el 18 de mayo. Doohan, visiblemente afectado, admitió que la decisión es “difícil de asumir”, pero prometió mantener su enfoque y seguir contribuyendo al equipo como piloto reserva.
El rendimiento de Doohan en las primeras seis carreras de la temporada 2025 no cumplió con las expectativas de Alpine. Sin puntos en su haber, el australiano acumuló incidentes costosos, como un accidente en la primera vuelta en Australia, sanciones en China y un choque en Miami que selló su destino. Su error más notable ocurrió en Japón, donde dejó el alerón DRS abierto en la curva 1 durante los entrenamientos, dañando gravemente su monoplaza. Este incidente, según el medio Autosport, fue un “punto de inflexión” que erosionó la confianza del equipo en su capacidad para liderar. A esto se sumó la presión mediática y de los aficionados, especialmente desde América Latina, que clamaban por la titularidad de Colapinto.
Franco Colapinto, de 21 años, regresa a la Fórmula 1 tras un debut prometedor con Williams en 2024, donde sumó cinco puntos en nueve carreras. Su llegada a Alpine en enero de 2025, impulsada por el asesor ejecutivo Flavio Briatore, aumentó la presión sobre Doohan desde el inicio. Briatore, conocido por su respaldo a talentos como Michael Schumacher y Fernando Alonso, vio en Colapinto una apuesta segura, respaldada por patrocinadores argentinos como Mercado Libre. La salida del director del equipo, Oliver Oakes, y la asunción de Briatore como jefe interino facilitaron el cambio, que muchos medios franceses, como L’Equipe y AutoHebdo, calificaron de “esperado e inevitable”.
Doohan, en un comunicado oficial, expresó su gratitud hacia Alpine por haberle permitido cumplir su sueño de competir en la Fórmula 1. “Estoy orgulloso de haber alcanzado mi ambición de ser piloto profesional, pero como competidor, naturalmente quiero estar en la pista”, afirmó. A pesar de su descenso a piloto reserva, el australiano se mostró comprometido con los objetivos a largo plazo del equipo, asegurando que seguirá “trabajando duro” y observando “con interés” las próximas cinco carreras. Su futuro en Alpine permanece incierto, con una reevaluación de la alineación prevista tras el Gran Premio de Austria en junio.
Por su parte, Colapinto celebró la oportunidad con entusiasmo en sus redes sociales, escribiendo: “¡Se hizo larga la espera! Feliz, estamos de vuelta”. En Instagram, agradeció a Alpine por la confianza y prometió “dar todo” en Imola. Su regreso ha generado una ola de apoyo en Argentina, con figuras como Bizarrap enviándole mensajes de aliento. La decisión de Alpine, según el equipo, responde a una “evaluación táctica” para maximizar resultados en un año crucial antes del cambio de reglamento en 2026.
El contraste entre ambos pilotos es evidente. Mientras Doohan luchó por adaptarse, Colapinto demostró consistencia en Williams, superando al australiano en sus enfrentamientos directos en 2024. La presión de Briatore y el respaldo económico de los patrocinadores argentinos inclinaron la balanza a favor del pilarense. En un deporte tan cruel como la Fórmula 1, donde los resultados son implacables, Colapinto tiene ahora la oportunidad de brillar, mientras Doohan debe esperar en las sombras, con la esperanza de redimirse en el futur