Nationwide — Conozcan a Pamela Goodwine, quien hizo historia al ser la primera mujer afroamericana elegida para la Corte Suprema de Kentucky. Prestó juramento oficialmente como jueza durante una concurrida ceremonia en Frankfort, marcando otro hito en su larga carrera en derecho.
La trayectoria de Goodwine ha estado llena de desafíos personales. Nacida en Youngstown, Ohio, vivió un tiempo en un hogar de acogida antes de ser adoptada. En la preparatoria, renunció a una beca universitaria para cuidar de su padre adoptivo, quien padecía cáncer de pulmón. Tras su muerte, su tío asesinó a su madre.
A los 24 años, Goodwine fue diagnosticada con la enfermedad de Crohn, una afección dolorosa y crónica. Pasó dos meses en el hospital, aprendiendo a comer y caminar. Posteriormente, comenzó a trabajar en el ámbito legal como secretaria y taquígrafa judicial. Obtuvo su licenciatura y su título en derecho en la Universidad de Kentucky.
“Siempre digo que no renuncio a mis sueños cuando la vida se pone difícil, simplemente trabajo más duro para hacerlos realidad”, dijo Goodwine, según Kentucky Lantern. “Si hay una filosofía y una acción por las que me gustaría ser conocida y que todos ustedes también reconozcan y vivan, es esta. No importa lo que la vida les depare, sigan soñando, sigan trabajando por sus metas”.
Goodwine se convirtió en jueza de distrito en 1999 y luego en jueza de circuito en 2003. En 2018, se convirtió en la primera mujer negra elegida para el Tribunal de Apelaciones de Kentucky. Con su elección para la Corte Suprema, es ahora la primera persona en la historia del estado en servir en todos los niveles del poder judicial.
Su victoria también otorga a la Corte Suprema de Kentucky una mayoría femenina por primera vez. Líderes, incluido el gobernador Andy Beshear, calificaron su historia como un poderoso recordatorio del progreso y la representación en el sistema legal.
