El mundo de la Fórmula 1 está en llamas tras el reciente test privado en Monza, donde Franco Colapinto, el joven piloto argentino de Alpine, dejó boquiabiertos a todos con una actuación que eclipsó por completo a Jack Doohan, su rival directo por un asiento titular. La pista italiana, cuna de leyendas, fue el escenario de un duelo que podría cambiar el rumbo de la temporada 2025 y, posiblemente, la carrera de ambos pilotos.

Colapinto, de 21 años, se subió al Alpine A523 de 2023 como parte de las pruebas TPC (Test Previous Car), diseñadas para evaluar a los reservas. Lo que nadie esperaba era la brecha abismal que marcó frente a Doohan y Paul Aron, otro piloto de la academia. Según rumores que corren como pólvora en el paddock, el argentino no solo superó a Aron por medio segundo en tandas cortas, sino que en simulaciones de carrera llegó a sacarle siete décimas por vuelta. Aunque las condiciones no eran idénticas, la superioridad de Colapinto fue innegable, desatando una tormenta de especulaciones sobre el futuro de Doohan.

El australiano, quien debutó esta temporada junto a Pierre Gasly, no atraviesa su mejor momento. Su accidente en Suzuka, donde destrozó su monoplaza al no cerrar el DRS en la primera curva, le costó a Alpine más de un millón de euros y puso en duda su capacidad para manejar la presión. Sumado a esto, sus resultados mediocres—15º en Japón tras partir 19º—no han convencido a Flavio Briatore, el asesor de Alpine que no duda en mover piezas para optimizar el equipo. “Quiero a los mejores pilotos, sea Colapinto, Doohan o quien sea”, declaró Briatore, dejando claro que nadie tiene el puesto asegurado.

Monza no fue solo un test para Colapinto; fue una declaración de intenciones. El argentino, que ya sorprendió en 2024 con Williams al sumar puntos en circuitos tan exigentes como Bakú, demostró estar listo para dar el salto. Su carisma y respaldo de una ferviente hinchada latinoamericana lo convierten, además, en un imán comercial, algo que no pasa desapercibido para los equipos. Mientras tanto, Doohan, visiblemente afectado por la sombra de Colapinto, lucha por mantener la compostura. “Sé que está ahí, pero me concentro en mi trabajo”, dijo, aunque su lenguaje corporal cuenta otra historia.
El Gran Premio de Baréin, próximo en el calendario, será decisivo. Si Doohan no logra brillar, la puerta podría abrirse para Colapinto en Arabia Saudita o incluso Miami, donde se espera un fuerte apoyo de sponsors argentinos. La F1, siempre implacable, no perdona la falta de resultados, y Colapinto lo sabe. Con su talento y ambición, está listo para tomar el volante y escribir su nombre en la historia. ¿Será este el fin de Doohan en Alpine? Solo el tiempo y la pista lo dirán, pero una cosa es segura: Colapinto no piensa esperar mucho más.[](https://www.planetf1.com/news/truth-behind-franco-colapinto-paul-aron-monza-test-data)[](https://www.pitpass.com/79850/Colapinto-test-at-Monza-fuels-speculation)